La gran SORPRESA que me encontré en Bucarest (Rumanía)
Antes de empezar a contarte, te adelanto ya que el viaje a Bucarest ha sido el único de todos mis viajes por el este de Europa en el que no ligué en los primeros 5 días tras mi llegada (si entendemos ligar como tener sexo, porque sí que tuve la oportunidad de conocer a una chica y nos enrollamos)…
Sin embargo, a pesar de todo, si tú eres un hombre promedio o del montón interesado en viajar a lugares en los que puedas conocer chicas, voy a decirte que es posible que Bucarest sea una muy buena opción para ti.
Y al final del artículo sabrás por qué 😉
Próximo destino Bucarest (Rumanía)
Después de, no sé, como 10 o 12 viajes, le tocó el turno a Bucarest (Rumania), una ciudad que siempre me había llamado la atención, que siempre tiene unos vuelos baratísimos y que, además, también es un país muy barato si lo comparas con España.
Pero reconozco que lo que más despertaba mi curiosidad eran las chicas de allí. Mi experiencia previa con chicas rumanas había sido muy positiva, en Madrid pude conocer a unas cuantas y la verdad es que siempre me fue muy bien con todas ellas, así que deduje que en la propia Rumania me iría incluso mejor.
Siempre nos gusta vivir en la zona centro de las ciudades a las que viajamos para tener buena logística.
Lo que hice fue el mismo modus operandi que en anteriores viajes (si algo te funciona no lo cambies), pagué el Tinder Plus, puse mi localización en Bucarest y empecé a disfrutar de la lluvia de matches, como siempre hago en cualquier lugar que no es España.
Y tuve muchas conversaciones antes de llegar a Rumanía, pero en especial me gustó mucho una chica, físicamente muy atractiva, que además hablaba un poquito de español y con la que tuve mucha química.
“Me gustas mucho, pero en Rumanía no se folla el primer día”
Esta chica, al igual que mi novia húngara, tenía muchas ganas de conocerme. Hablábamos por Whatsapp, nos mandábamos notas de voz… pero había algo que me indicaba que las cosas no iban a ser tan fáciles como en Hungría.
Al segundo día de llegar a Bucarest tuvimos nuestra primera cita y la verdad es que fue genial.
Nada más vernos nos abrazamos con ganas como dos enamorados, nos besamos, paseamos de la mano, me enseñó el centro de Bucarest, me llevó a un sitio a tomamos algo, nos fuimos en taxi al Parque Herăstrău donde estuvimos cenando.
Fue una cita perfecta, ella iba muy guapa, y yo, después de tantos besos, estaba muy caliente. Le propuse ir a su apartamento para pasar la noche juntos (previamente me había dicho que vivía sola), pero ella muy educadamente me dijo que NO.
Parque Herăstrău, uno de los sitios más bonitos de Bucarest.
Según me dijo, el motivo era que ella no era una chica fácil, que yo le gustaba mucho, y que también tenía ganas, pero que en Rumanía las cosas no funcionan de esa manera. Y cuando dijo eso, lo que quería decir es que en Rumanía no pasa como en Europa occidental, donde los guaperas follan una vez y luego desaparecen para siempre (y yo en Rumanía era un guaperas).
Me dijo que para tener sexo necesitaba que nos conociéramos mejor, que necesitaba saber que lo que yo buscaba no era solo sexo.
Yo me quedé a cuadros y me vine muy abajo. Ella me gustaba mucho, pero tampoco tenía muchos días más (aquel viaje era de 7 días y ya solo me quedaban 5), así que le dije toda la verdad y ella me dijo que si solo íbamos a poder estar juntos durante ese tiempo, lo mejor era no vernos más y quedar como amigos.
Todavía hay lugares en Europa a los que no ha llegado la revolución sexual
Cuando llegué al apartamento y le conté a Carlos lo que había pasado también flipó un poco. Si te soy sincero, ni siquiera recordaba la última chica con la que no me acosté el primer día de conocerla, en serio.
Que sí, que he tenido citas que han salido mal y ella no me ha gustado o yo no le he gustado a ella, pero en los últimos cuatro o cinco años TODAS las veces en las que nos hemos gustado, mis primeras citas han acabado en sexo.
Por eso para mi era un shock que una chica con la que me estuve enrollando toda la tarde, que no paraba de decirme lo mucho que le encantaba, que era su prototipo de hombre, que queria ser mi novia, que hacía planes para compartir conmigo… me dijese que en Rumanía NO se folla el primer día como hacemos en España.
Es como haber preparado un pastel súper rico pero no te lo puedes comer, lo tienes que meter en la nevera y dejarlo ahí un tiempo para que se enfríe y ya poder sacarlo para comertelo.
Después de ese fail me metí en Tinder de nuevo y fui 100% honesto con todas las chicas con las que había estado hablando y que me gustaban. Todas me dijeron lo mismo. Que en Rumanía las chicas no hacen como hacemos en “west Europe”.
Así que Carlos y yo hicimos la prueba definitiva
Para saber si las chicas rumanas nos decían la verdad, hicimos un experimento en Tinder que nos iba a dejar las cosas muy claras. Algo que ya hemos hecho en España varias veces y que siempre nos ha dado los mismos resultados.
Creamos un perfil con las fotos de un guaperas, dimos likes a todos los perfiles de las chicas y una vez empezaron los matches a llegar, empezamos a proponer sexo de una manera educada a todas las que nos habían devuelto el like.
Como te decía, hemos hecho este experimento varias veces en España, y en Madrid las chicas siempre aceptaban la proposición de sexo de un guaperas entre el 95% y el 100% de las ocasiones. Y no hace falta que sea un experimento, aquí tienes capturas de pantalla de la cuenta de Tinder de nuestro colega Juan el guaperas.
Pues bien, en Bucarest NINGUNA de las chicas aceptó la propuesta sexual de un guaperas. TODAS agradecieron de una manera muy amable el intento e incluso halagaron la belleza física del chico, pero luego dijeron que en Rumanía las cosas no funcionan de esta manera y dijeron que NO querían conocer chicos que buscaran solo sexo.
Esto es lo que más a cuadros nos dejó.
Entonces, ¿por qué te recomiendo Bucarest?
Si tú lo que buscas es disfrutar del sexo rápido y sin compromiso junto a chicas que buscan exactamente lo mismo, desde luego que Rumanía no es tu mejor destino.
Sin embargo, en una sociedad en la que las mujeres rechazan las proposiciones sexuales de los guaperas y dicen que “solo van a tener sexo con hombres que se tomen el tiempo suficiente en demostrar que NO buscan solo sexo”, lo que ocurre es que hay un reparto mucho más justo del mercado sexual.
Hay un montón de chicas fantásticas deseando conocerte 😉
Porque los guapos son capaces de follárselo todo mientras sea fácil y rápido, pero en el momento se lo tienen que currar un poquito, por las únicas chicas por las que se lo van a currar va ser por las guapas. Y claro, si las chicas promedio quedan libres, los hombres promedio van a tener su oportunidad.
Pero es que para colmo, Rumanía es un país con superpoblación chicas jóvenes y atractivas (si hubieras visto mis matches en Tinder habrías flipado) y, además, sienten una debilidad especial por los españoles (hay muchas que hablan español solo por ver nuestros programas de TV).
Todo esto es lo que hace que para el hombre promedio o del montón español que esté interesado en tener una pareja estable y que tenga la oportunidad de pasar un tiempo allí, las cosas sean más favorables que en ningún otro lugar de Europa.
Así que ya sabes, si te gustaría tener una novia más guapa y más joven que tú, te puedes ir de Erasmus o eres un nómada digital que puede trabajar en remoto, Bucarest debería estar en tu punto de mira.
Lo único que necesitarás allí es ser sincero con tus intenciones y ser tu mismo. Para más de uno, algo tan simple como esto puede sonar casi como a paraíso. Y recuerda llevar Tinder Hack cuando estés de visita en el paraíso.
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