¿Es tan fácil ligar en Tailandia? – Mi experiencia ligando en Bangkok, Tailandia
Ya hemos hablado en el blog de las bondades que el sudeste asiático puede ofrecer al hombre promedio o del montón español, pero hasta ahora solo podíamos basarnos en lo que habíamos leído por ahí y en lo que nos habían contado.
Hoy por fin puedo contarte cómo fue mi experiencia personal en Bangkok, Tailandia. ¿Es tan fácil ligar en Tailandia? Hoy lo vas a descubrir.
Y como intuyo que este puede ser un artículo que a la larga acabe llegando a mucha gente, por si eres nuevo y no me conoces, antes de nada voy a ponerte en situación.
Soy un hombre promedio o del montón de 35 años. Más promedio que yo no se puede ser. Mido 1’75, peso 70kg, no tengo grandes defectos, pero tampoco tengo ninguna virtud. En España jamás he gustado a una chica por mi físico y por eso, todas las veces que he ligado en nuestro país ha tenido que ser gracias a saber cómo hacer las cosas de la manera correcta.
(Y también por si eres nuevo, si quieres saberlo todo sobre cómo ligar cuando no eres guapo, te lo cuento aquí).
Uno de los motivos por los que fui a Tailandia, aparte del turismo, desconectar del trabajo, la comida y lo típico, fue el de poder sentir esa abundancia sexual que sienten todas las mujeres y los hombres guapos en España.
Básicamente, me refiero al hecho de poder ligar gracias a gustar por mi físico, como si fuera un gurú guaperas de la seducción, algo que los hombres promedio o del montón tenemos prohibido en nuestro país.
Y llámame loco, pero creo que todos nos merecemos poder vivir algo así, aunque sea una vez en la vida, incluso nosotros, los hombres promedio o del montón que la sociedad española tanto se está empeñando en castigar día tras día.
Pues bien, ¿quieres saber lo que ocurrió en Tailandia?
Sigue leyendo.
Los foros dicen que ligar en Tailandia ya no es tan fácil
Así es, antes de viajar me metí en todos los foros americanos que encontré sobre el tema que nos ocupa y la opinión de los participantes era unánime.
El sudeste asiático sigue siendo uno de los mejores lugares del mundo para el hombre promedio o del montón occidental, pero ligar en Tailandia ya no es tan sencillo como lo era hace 3 o 4 años.
El motivo de esto, según decían, es que cada día que pasa hay más hombres huyendo de los países postmodernos para disfrutar de la vida en países en los que no hay guerra de sexos y en los que se valora al hombre occidental.
El este de Europa ya se ha puesto bastante complicado por este motivo y, como te decía, ya son muchos los que comentan en los foros que lo mismo está empezando a suceder también en el sudeste asiático, especialmente en la ciudad de Bangkok, capital de Tailandia.
Eso sí, aclaraban que aunque las cosas ya no son tan fáciles, aquello seguía siendo mil veces más fácil que en cualquier país de Europa, incluyendo los del este.
Yo, para ir probando, localicé mi perfil de Tinder en Bangkok una semana antes de llegar a Tailandia, para ir viendo en mi Gold si mi cuenta poco a poco se iba llenando de opciones… ¿Y sabes qué fue lo que ocurrió?
Pues que el día antes de llegar solo tenía 4 o 5 likes. O sea, una puta mierda.
No era, desde luego, la mejor manera de empezar el viaje. ¿Tan complicado se había puesto el tema en Tailandia en tan poco tiempo? ¿o todo era cosa de Tinder, que si no pagas un boost ya ni muestra tu perfil?
Las respuestas llegarían unas horas más tarde, en mi primer día en Bangkok.
Primer día en Bangkok, Tailandia
Nada más aterrizar en Bangkok recibes como una bofetada en la cara, no sé si es por la humedad, por la contaminación o por la mezcla de las dos cosas, pero el ambiente de la ciudad es pesadísimo. Además, el shock cultural es grande también. Nunca había estado en un lugar tan diferente a occidente.
Y a pesar de todo, mientras caminaba por la calle, noté que no llamaba nada la atención entre los locales. Ni en el paseo en el metro, ni de camino a mi apartamento. Era como invisible. Como si fuera uno más.
Esto me chocó porque en nuestros primeros viajes por el este de Europa allá en 2014 sí que hubo miradas y, en las discotecas, hasta las chicas (jovenes y guapas) nos entraban para preguntarnos de dónde éramos.
Sin embargo en Bangkok era como si estuvieran acostumbradísimos a los occidentales.
Llegué a la zona en la que estaba mi apartamento y allí ya lo entendí, toda la zona estaba llena de hombres de raza blanca de la mano de chicas tailandesas. Nunca veías el caso contrario. Parece ser que la cantidad de occidentales en la ciudad es realmente brutal.
Después de echar la siesta abrí la app de Tinder, y ahí estaban los mismos 4 ó 5 matches que tenía antes de partir. Era hora de enchufar un boost y ver qué era lo que sucedía, si de verdad Tailandia se había puesto tan complicado o si solo era Tinder que me estaba troleando.
Pues bien, después de los 30 minutos de boost llegaron unos 40 o 50 likes. Nada mal para empezar, definitivamente, no había llegado tarde al paraíso, solo era que Tinder últimamente se está poniendo intratable..
Primeras conversaciones por el chat de Tinder en Tailandia
Aquel primer día tuve unas cuantas conversaciones en Tinder. Pero como estaba con un jet lag de la hostia y cansadísimo, mi idea no era quedar ese mismo día, sino tener unas cuantas buenas conversaciones para poder tener alguna cita al día siguiente.
Hice exactamente lo mismo que suelo hacer en España o en Europa, es decir, utilizar diferentes rutinas que me funcionan para tener una conversación divertida y creativa, de modo que despierto la curiosidad de ellas y así consigo tener una cita.
Pues fracaso total.
Las chicas tailandesas enseguida perdían el interés, dejaban de responder y desaparecían.
Estaba alucinando por momentos y volví a pensar, ¿de verdad hasta Tailandia se ha puesto así de complicado?
Estaba tan cansado que me fui a dormir, ya el día siguiente sería otro día.
Al día siguiente descubrí lo que sucedía
No sé cómo fue exactamente, pero al día siguiente, después de sumar algún que otro fracaso en el chat de Tinder, decidí probar algo distinto, que fue abrir conversación con una chica, intercambiar con ella cuatro frases y, después de eso, proponerle salir a tomar algo.
Dijo que SÍ.
Sorpresa. Esto en Europa nunca me funciona.
Ya te he dicho que en España yo nunca gusto físicamente a primera vista, por lo que me tengo que ganar la cita a base de mostrar otras cualidades y despertar su curiosidad, por lo que siempre he de currarme una buena conversación.
Sin embargo, con aquella chica no necesité nada de nada, solo mi foto de perfil. Me quedé tan sorprendido que lo intenté con dos chicas más. Hice exactamente lo mismo: Hola, qué tal? de donde eres? a qué te dedicas? vamos a quedar…
Y volvió a funcionar.
No me podía creer que las cosas fueran tan fáciles.
Al final, resulta que era yo el que me estaba complicando de más sin motivo. En Tailandia las chicas ven el chat de Tinder tan aburrido como lo vemos nosotros y lo que quieren es pasar directamente a la acción.
Si te pones a chatear demasiado, son ellas las que pierden el interés y pasan al siguiente tío que tenga huevos de invitarla a salir. No pierden el tiempo.
En Tailandia hay muchas chicas abiertas a tener sexo rápido y sin compromiso, pero no todas buscan lo mismo
Todo era tan sencillo como salir a tomar una cerveza, conocernos, pasar un buen rato juntos y, al terminar nuestras bebidas, invitarla a tomar la segunda en mi apartamento.
Y por cierto, no traté de besar a ninguna de las chicas con las que quedé en público. Recordé que había leído en alguna parte que eso no les gusta y, de hecho, nunca vi un beso en público de ninguna pareja, ni de parejas tailandesas ni de tailandesa con occidental.
Sin embargo, nada más entrar a mi apartamento para tomar la segunda cerveza, el beso llegaba de la manera más natural posible.
Definitivamente, a pesar del mal comienzo, Tailandia sigue siendo un paraíso para el hombre promedio o del montón español.
No quiero darte demasiados detalles porque pensarás que me estoy tirando el pisto, solo te diré que pude quedar con tantas chicas como quise.
Después de lo vivido, me resulta complicado imaginar a un hombre promedio o del montón que no pueda ligar allí, y si tú eres al menos un 5, vas a sentirte como si fueras un gurú guaperas de la seducción.
Vas poder gustar por tu físico a primera vista, y eso te va a dar la seguridad de que, en la cita, todo lo que digas o hagas va a ser divertido, gracioso y atractivo. Como siempre has visto en los vídeos de YouTube, pero ahora el protagonista vas a ser tú.
Pero, como te decía, aunque hay muchas chicas abiertas al sexo rápido y sin compromiso, no todas lo están. Todavía hay por allí muchas chicas tradicionales y he de reconocer que las más atractivas con las que quedé solo querían relaciones a largo plazo.
Tuve un match con una chica que me gustó tanto que pensé “si las cosas van bien con ella, me borro el Tinder” y nada más empezar la conversación, ella me dijo “Hola, puedes llamarme tu futura esposa”.
Le dije de quedar a tomar una cerveza cerca de mi apartamento y ella me dijo que no bebía alcohol y que quería quedar en un centro comercial que estaba más lejos. A mí eso no me moló ni un pelo y ella lo notó, así que me dijo “pero no te preocupes, porque me gustas :)”.
Fui y tuve una cita con la chica más encantadora y más bonita del mundo. Además, era muy inteligente y tenía un buen trabajo. Ella pagó sus cosas e insistió en ello.
Pero me dijo que lo que buscaba era un novio con el que casarse y seguir viviendo en Bangkok, ya que su carrera estaba allí, y yo le encanté para ese proyecto. Y yo, obviamente, fui totalmente sincero con ella y le dije que mis planes eran otros, aparte de que solo podía estar en el país por 30 días.
Al final no pasó nada entre nosotros, pero me gustó la sensación de quedar con una chica físicamente tan atractiva y tan encantadora, y que todo fuera tan fácil y sin tests, con ella diciéndome desde el principio que le había encantado y que le gustaría conocerme mucho más con el objetivo de tener una relación exclusiva conmigo.
Unos días más tarde conocí a otra belleza mitad india mitad tailandesa, pero pasó exactamente lo mismo. Ya sabes que yo jamás miento sobre mis intenciones y jamás prometo nada que no voy a cumplir, por lo que tampoco sucedió nada entre nosotros.
Fue todo muy guay, pero lo cierto es que ambos quedamos un poco decepcionados al ver que no buscábamos lo mismo, así que, después de esto, decidí usar mi perfil sexual mágico de Tinder, para así poder conocer chicas que buscaban lo mismo que yo.
La chica que me enseñó su cuenta de Tinder
En una de mis citas le pedí a la chica que me enseñara su cuenta de Tinder, le dije que quería jugar con ella a elegir tíos. Ella me dijo que sí encantada y me dejó su móvil con la app abierta. Le dije que iba a empezar a deslizar perfiles y que ella me tenía que decir si le dábamos un “like” al tío o lo mandábamos al carajo, y a ella le pareció divertido…
Pues bien, lo que vi en Tinder desde la perspectiva de un perfil de chica me sorprendió bastante.
Resulta que, en Bangkok, solo alrededor del 30% de los hombres tenían look asiático, entre los cuales no solo había tailandeses, sino que también chinos, coreanos y de otros países. Alrededor de un 10% eran indios. Pasaron un par de perfiles de hombres de raza negra y, por último, como un 60% de los perfiles eran de hombres de raza blanca de países postmodernos.
Joder, ya hasta en Tailandia somos mayoría.
Empezamos a jugar y cada vez que aparecía el perfil de un asiático en pantalla la chica decía NOP. Cuando aparecía un Indio decía NO NO NO NO NO y hacía gestos para aclararme que ni de coña, y cuando aparecía un occidental ya parábamos y se lo pensaba.
En las comunidades web postmodernas dicen que cuando las mujeres hacen esto no es racismo, que son preferencias sexuales. Yo no sé qué decirte. Solo te cuento lo que pasó.
Después de jugar un rato pregunté a la chica si me dejaba ver sus matches y me dijo que sí. Así que abrí la pestaña correspondiente y me encontré con 60 matches… TODOS eran hombres blancos caucásicos de países postmodernos.
Y le pregunté por qué no le gustaban los hombres asiáticos, indios o negros, y ella me dijo que los “white men” somos los que mejor tratamos a las mujeres. Yo me reí y le dije que en Europa occidental nos tratan como si fuéramos terroristas, y ella se quedó flipando.
El caso es que si en Bangkok hay tal cantidad de tíos de países postmodernos en Tinder y aún así ligar es facilísimo, imagínate la cantidad de chicas tailandesas que debe haber en la app. Es una ciudad de más de 10 millones de habitantes, así que parece ser que todavía tenemos que ir muchos más para allá para que la ciudad se queme.
Mis 3 follamigas
Después de un par de semanas en las que conocí a un montón de chicas, hubo tres chicas con las que sentí una conexión especial y seguí quedando con ellas como follamigas. Y lo mejor de estas tres relaciones fue que en todo momento todos fuimos totalmente sinceros.
Ellas en todo momento supieron que yo solo tenía 30 días allí, que no buscaba nada serio y que solo buscaba pasarlo bien y ellas de manera muy honesta me dijeron que buscaban lo mismo. Hasta nos contábamos cómo eran nuestras citas cuando quedábamos con otras personas de Tinder.
Una de ellas llegó un día a mi apartamento y mientras tomábamos la cerveza me contaba… “el otro día quedé con un francés, tenía pollón, pero no follaba muy bien, no aguantó ni 5 minutos jajaja…”, y acto seguido me preguntó por cómo había ido mi semana en Tinder.
Es genial cuando puedes hablar de estas cosas con una follamiga, eso demuestra que no hay celos, que de verdad sois follamigos y que ninguno de los dos está por el otro en secreto y está tragando con lo que puede para no perder al otro.
La chica que me enseñó su cuenta de Tinder hasta me pedía que le enseñara las fotos de las chicas con las que había quedado. Era muy curiosa.
En resumen, relaciones de follamistad muy sanas. Y mientras escribo este artículo, ya hace más de 10 días que me fui, y todavía me siguen enviando mensajes diciéndome que vuelva pronto.
Casi nada de gold diggers
He querido incluir este apartado porque sé que hay ciertos mitos sobre las mujeres en Tailandia y por mi experiencia, son falsos.
Sé que Tailandia es famoso por el tema de prostitución y quizás muchos piensen que lo único que quieren las chicas de Tinder es alguien que las saque de allí. Pues bien, es cierto que hay prostitución, pero los que consumen ese tipo de servicios son los hombres muy mayores de países ricos.
Y digo esto porque a mí no se me acercó ninguna chica para pedirme pasta (aunque tampoco estuve en las zonas de prostitutas) y en Tinder solo recuerdo un par que me dijeron que eran “freelancers”. Nada comparado con Ucrania, donde más de la mitad de las chicas jóvenes de Tinder cobra.
Ninguna de las chicas que conocí en persona me pidió dinero, todas se ofrecieron a pagar lo suyo en las citas y, de hecho, en la mayoría de ocasiones lo hicieron. Todas tenían un trabajo, algunas se notaba que hasta tenían un buen trabajo y ninguna me dijo que quería escapar del país. Incluso las que buscaban relación seria quería quedarse allí.
O sea, que si vas a Tailandia y ligas, lo más seguro es que sea porque les has gustado de manera genuina, no tiene por qué haber segundas intenciones. Gustarás por tu aspecto físico, y sentir algo así, cuando es algo que tenías prohibido en España, es algo que no tiene precio.
Conclusión
Dicen en los foros que Tailandia es el lugar menos fácil para ligar de todos los países del sudeste asiático. Pues si este es el menos fácil… no me quiero ni imaginar como son los demás.
A pesar de la gran cantidad de hombres provenientes de países postmodernos, Tailandia sigue siendo un muy buen destino para el hombre promedio o del montón español.
Veo casi imposible que no puedas ligar allí y si lo que buscas es una relación seria, allí podrás conocer chicas atractivas y maravillosas que jamás han tenido contacto alguno con la postmodernidad.
Sea lo que sea lo que buscas, allí lo podrás encontrar, y lo mejor de todo, podrás ser siempre 100% sincero y no necesitarás ningún tipo de estrategia o truco para ligar. Simplemente podrás hacer como un gurú guaperas de la seducción, o sea, al saber que vas a gustar físicamente de entrada, sabrás que cualquier cosa que hagas o digas funcionará.
Tengo pensado volver pronto o quizás visitar uno de los países en los que dicen que las cosas son todavía mucho más fáciles para el hombre promedio español como tú y como yo…
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