El testimonio de Miguel, asistente del Summer Camp del año pasado- Spoiler… hubo Sexo
Hoy quiero compartir contigo el email que nos envió Miguel después de asistir a nuestro taller de seducción de verano el año pasado (turno 1).
En él vas a leer una historia de una gran cagada y cómo al día siguiente pudo resarcirse.
Para que te hagas una idea, Miguel es un hombre promedio o del montón de 37 años, mide 1’81 y cuando nosotros le conocimos en el taller, le sobraban algunos kilos, nada que no se pudiera solucionar con un poco de dieta y ejercicio.
Además, está calvo y va totalmente rapado y como él dice, digan lo que digan en los medios de manipulación, eso es algo que te lo pone más complicado a la hora de ligar.
Te dejo con él…
El testimonio de Miguel
Acabé una relación de 10 años, después de unas semanas volví a salir y de lo primero que me di cuenta es de que todo había cambiado mucho… Nada era como en 2008. Salí 3 fines de semana con amigos y no conseguimos ni hablar con mujeres. Lo que hacía antes no me servía ahora.
Entonces decidí buscar en internet y di por casualidad con este blog…. estuve leyendo sus post toda la tarde. Al ver los resultados del perfil mágico de Luigi, sentí curiosidad y decidí apuntarme a un Camp.
El taller marcó un antes y un después, cuando llegué, creía que iba aprender cosas, pero me sorprendió la cantidad de información que pude conseguir en esos 5 días.
El primer día fue super intenso, nos mostró la realidad actual en España. Había leído el libro, y conocía los datos pero cuando nos enseñó los experimentos que habían realizado no me lo podía creer… La información de este primer día fue como tomar la pastilla roja, empezaban a encajarme muchas cosas.
Los siguientes días nos enseñaron su método con todo detalle… tanto que no había ni preguntas… Cuando vi la cuenta de Tinder de Luigi, sus conversaciones, sus rutinas, me di cuenta de lo equivocado que había estado… invertía días, casi semanas, hablando con chicas para luego conseguir una cita o no… él lo hacía en un día y con chicas atractivas, siendo un tío promedio como yo.
La manera en la que está organizado el taller está muy pensada, se alterna la formación con tiempo de descanso. Me topé en el taller con gente fantástica, con los que fuimos compartiendo experiencias que me aportaron mucho. El hecho de estar todos juntos nos animaba a probar y hacer cosas.
Durante el campamento, viendo que todos estaban poniendo en práctica lo aprendido y habían quedado con chicas, decidí ponerme en marcha. El sábado por la noche tuve una match con una chica que me cuadraba. Aplicando lo que aprendí ese mismo día en el taller conseguí una cita para el día siguiente.
Me lancé a ello justo la noche antes del día en el que íbamos a ver todo lo referente a primeras citas. Me lo tomé como una forma de probar y al día siguiente ver cuáles fueron mis errores.
Aquello fue un desastre, y lo fue porque no supe hacer que las cosas sucedieran. Hasta ese momento había tenido citas con chicas más normales, y ésta, sin ser una modelo, estaba en una liga superior, lo que hizo que, a pesar de entretenernos mucho juntos, al final no pasara nada.
Al día siguiente, nos explicaron cómo tener una primera cita perfecta, me di cuenta de todos los errores que cometí la noche anterior. Esa misma tarde la chica me escribió un whastapp y aproveché para obtener información… ella me dijo lo mismo que Luigi me había dicho:
“Estoy de acuerdo contigo en que habernos besado y que hubiesen pasado más cosas hubiese hecho nuestra cita mejor, pero no surgió y luego (cuando intentaste besarme) pues me quedé parada… No me lo esperaba”.
Aquella noche me costó mucho dormirme, había quedado con una chica, cenado, tomado una copa, dado un paseo por la playa y me esperé al final para darle el beso cuando durante la cita hubo momentos claros de que ella se moría de ganas…
Cuando la besé al final de la noche me hizo la cobra, y lo peor es que después de mandarme ese mensaje, me dijo que habíamos perdido el interés (realmente quería decir que ella había perdido el interés)…
Al día siguiente volví a utilizar lo aprendido en el taller y conseguí una cita con otra chica. Tenía que poner en práctica lo aprendido y demostrarme que era capaz, necesitaba aprender de lo que había pasado la noche anterior.
Y eso fue lo que hice, hablé sobre lo que iba a hacer, quedé con esta chica y acabamos en su cama en menos de 30 minutos. Sin cena, sin copas, sin paseo… solo haciendo que las cosas ocurrieran. Aquella noche la pasamos juntos.
Este taller está suponiendo un gran cambio en mi vida. Ahora sé cómo funcionan las cosas y lo que tengo que hacer. Cuando fui al taller, ya tenía citas, gracias a la consultoría que hice con Luigi unos meses antes, pero lo aprendido en elCamp me va a llevar a otro nivel en todos los sentidos…. Os iré contando en unos meses.
El taller es 100% es obligatorio si eres un hombre normal y promedio.
Un abrazo,
Miguel
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Mis comentarios
Siempre hay muy buen ambiente y mucha positividad en nuestros talleres presenciales, pero recuerdo especialmente las caras de sorpresa y de flipar en colores de Miguel. Cada vez que enseñábamos algo por la pantalla de la TV, especialmente cuando Carlos conectaba su cuenta de Tinder para que todos la vieran en directo, era un momento en el que Miguel siempre se quedaba con la boca abierta xD.
De verdad que es muy importante conocer la verdad.
Sobre sus dos citas, las recuerdo perfectamente. A la primera acudió sin saber prácticamente nada y ya has leído lo que sucedió. Lo pasaron muy bien, fueron a varios sitios… en realidad como multicita fue perfecta.
¿El problema? Que la cita fue totalmente family friendly, o sea, que no hubo nada de contacto físico, no sexualizó, no fue a por el beso… Miguel no rompió la comodidad en ningún momento, y eso que, según nos contó, durante la noche ella se insinuó… pero él no se lanzó.
Y al final de la noche, cuando Miguel se lanzó a por el beso en el momento de la despedida, la ventana de oportunidad ya se había cerrado. Además, que hacer la del buenazo de Hollywood, a no ser que seas muy guapo, es raro que funcione.
Pude ver los WhatsApp’s de la chica al día siguiente, en ellos podías ver cómo ella le rechazaba de manera súper educada y con cierta lástima, en plan, “sé que eres muy buen chico, pero es que no me pones…”.
Esto es lo que sucede cuando haces las cosas mal.
Al día siguiente vimos en el taller todo lo que hay que hacer para que las cosas sucedan en la primera cita y Miguel, que esa noche tenía otra cita, fue mentalizado… y tanto fue así que en menos de 30 minutos ya había metido boquita y estaban follando.
El último día nos contó lo sucedido, se lanzó porque sabía que tenía que hacerlo y sabía cómo hacerlo… y hasta se sorprendió de cómo respondió ella, cachonda perdida e invitándole a su casa para tener sexo.
Esto es lo que te puede suceder si haces las cosas bien.
¿Qué pasó con Miguel?
Una de las últimas veces que hablamos me comentó que la sesión que tuvimos por Skype antes del taller le sirvió para ligar con mujeres de su liga y de su edad, de 35 a 42 años más o menos.
Pero que después del taller y gracias al perfil sexual mágico, la cosa ascendió a otro nivel.
Lo último que sabemos de él es que dejó de usar Tinder porque tenía dos follamigas, las dos muy atractivas, una de 24 años (la otra no lo sé), con las que estaba encantadísimo de la vida.
Enhorabuena Miguel, me alegro mucho de que seas feliz.
(El nombre no es el real, pero para los que estuvisteis en el primer turno del año pasado, ya sabéis quien es 😉
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